Mi
madre española es una persona muy importante para mí en España. Pilar tiene el
corazón diferente a cualquier otra persona que haya conocido nunca. Ella es cariñosa,
inteligente, abierta, y una madre española fantástica. Tiene setenta años pero
su mentalidad es muy progresista. He aprendido a aceptar a otros más
abiertamente porque ella no juzga a nadie. Su comida es increíble. Todos los
días comemos en la mesa y hablamos durante una hora después de la cena. Tomamos
sopas, jamón, arroz, huevos, costillas, ensaladas, fruta, pan, y mucho más para
la comidas. Como mucho y ¡estoy más gorda que cuando llegué a España! Pilar ama
darme regalos. Ella me dio un collar blanco y negro muy elegante. Lo llevo con
mi vestido negro cuando me voy de casa con mis amigos. También, ella está
haciendo para mi una falda roja para la navidad. Estoy muy emocionada y
agradecida.